Dos películas para conocer a San Alberto Hurtado

Para saber más sobre este santo te recomendamos dos producciones chilenas que muestran diferentes facetas de su vida y que permiten recordarlo en en su día.

Si quieres saber más sobre el Padre Hurtado te recomendamos dos producciones chilenas que muestran diferentes facetas de la vida de este santo y que permiten recordarlo en su día (18 de agosto) y en el mes de la solidaridad.

Crónica de un hombre santo

Director: Cristián Masón

País: Chile

Duración: 123 minutos

Año: 1990

Esta es una miniserie de carácter biográfico producida por la Universidad Católica de Chile antes de su beatificación y protagonizada por Cristián Campos. La serie va narrando la vida del santo desde que era un joven inquieto, estudiante del colegio San Ignacio en Santiago hasta su muerte en 1952. Se destacan en esta producción la fidelidad a los textos y discursos del padre Hurtado, su preocupación por la juventud, por la situación de los trabajadores, su amistad con Manuel Larraín quien fue su compañero de curso en el colegio, la universidad, también se hace sacerdote y termina siendo obispo de Talca. Muestra también su preocupación por la justicia a la luz de la enseñanza social de la Iglesia y de la encíclica Rerum Novarum del papa León XIII y por una coherencia entre la fe y la vida diaria de tantos chilenos que debía verse traducida en actos de caridad hacia los más necesitados.

La película narra la fundación del Hogar de Cristo, deja ver cómo San Alberto iba a buscar niños de la calle que vivían a orillas del río Mapocho para llevarlos a tener una vida digna y cómo muchas personas y empresas se fueron solidarizando con la obra de este santo y comenzaron a apoyarlo con donaciones en dinero y especies. También muestra cómo las palabras del Padre Hurtado llenas de agudeza y de sentido social, incomodaban a más de un fiel, incluyendo a algunos miembros del clero quienes de manera ligera lo catalogaron como un revoltoso o miraban con escepticismo sus obras.

Si bien es una producción de 30 años de antigüedad que quizás en algunos momentos puede hacerse lenta o monótona, vale la pena ver esta miniserie para conocer más la figura de este santo y por la actualidad que cobran hoy sus palabras y sus preocupaciones sobre la justicia social, los derechos básicos de los trabajadores, la situación de la juventud y la necesidad de que la fe se haga vida y se traduzca en gestos de amor hacia los más necesitados.

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Alberto: ¿Quién sabe cuánto cuesta hacer un ojal?

Director: Ricardo Larraín

País: Chile

Duración: 107 minutos

Año: 2005

La película muestra una parte de la vida de San Alberto Hurtado y es cuando se estaba preparando para obtener su título de abogado en la Universidad Católica de Chile. Para ello realiza una investigación sobre las condiciones indignas en las que viven las mujeres costureras de camisas, el sacrificio que resulta hacer cada uno de los ojales y el poco dinero que obtienen por esto, en contraste con las altas ganancias que obtiene su patrón.

La película va constantemente al pasado y muestra la vida nada fácil que ha tenido este santo, cuyo padre fue asesinado cuando él solo tenía cuatro años de edad. Muestra el drama de su madre Ana, quien se ve obligada a trasladarse de Viña del Mar a Santiago con sus dos hijos pequeños y cómo tiene que vender las tierras de su marido por un precio muy inferior a lo que realmente valen. Este largometraje muestra cómo la inquietud social de Alberto lo conduce por el camino del discernimiento de su vocación como sacerdote jesuita, pese a las críticas que recibe de parte de muchos amigos y compañeros suyos quienes le dicen que resulta un desperdicio ser sacerdote ya que él, por la carrera brillante que ha tenido en el estudio de leyes, podría ser presidente de la república. Al joven Alberto le inquieta también la situación económica de su madre por lo que pasa horas enteras postrado en el suelo, orando para que esto no sea un impedimento para que él ingrese al noviciado de los jesuitas. La película muestra tambié cómo esta situación que tanto le inquieta puede verse providencialmente resuelta. En el mes de la solidaridad, resulta ideal ver este filme que muestra la vida, el recorrido vocacional, el ambiente en el que se movía San Alberto Hurtado así como sus fuertes inquietudes sociales que se le presentaban como un aguijón que no lo dejaba descansar y que lo llevaron finalmente a fundar el Hogar de Cristo.

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