Celebrando al “Lolo”, San Lorenzo de Tarapacá
Durante la primera quincena de agosto, el rojo y el amarillo son los colores que decoran el norte de Chile, en conmemoración de San Lorenzo de Tarapacá, que se celebra cada 10 de agosto.
Conocido en la actualidad como el patrono de los mineros, comerciantes y transportistas, la devoción a San Lorenzo en la región de Tarapacá ha ido en aumento a lo largo de los años, representando una de las festividades más grandes e importantes de la piedad popular. Por lo mismo, te invitamos a conocer más sobre esta importante fiesta.
Orígenes de la festividad
En 1955, un gran incendio que afectó la iglesia del pueblo de San Lorenzo de Tarapacá. Tras ello surge, con un carácter andino, la fiesta de San Lorenzo, para pedir al santo el don de la lluvia.
Todos los años se congregaban “feligreses de las altas mesetas andinas y de los estrechos valles de los alrededores durante una semana para formar una hermandad de danzantes y entregarse a la alegría y a la extraversión de cantos y bailes” (1), todo esto para celebrar al “Lolo”, como le dicen los fieles al Santo Patrono, quien tiene fama de ser un santo cobrador. Y es que se dice que el que no cumple sus mandas, sufre el mal humor de San Lorenzo, quien incendiaría las casas.
Con el tiempo, esta celebración ha ido dejando de a poco su carácter andino, transformándose en un culto mestizo y popular, donde año tras año son recibidos miles de peregrinos en el pequeño pueblo de San Lorenzo. En muchas ocasiones, llegan desde La Tirana a celebrar al “Lolo”.
Para conocer un poco más sobre la festividad, conversamos con Francisca Basaure, antropóloga y profesional del Instituto de Estudios Andinos Isluga de la Universidad Arturo Prat, quien nos entregó mayores detalles de la fiesta.
¿Cuáles son las principales labores que realiza el Instituto de Estudios Andinos Isluga? ¿Cuál es su relación con la fiesta de San Lorenzo?
El Instituto de Estudios Andinos Isluga de la Universidad Arturo Prat de Iquique, a través de su proyecto www.tarapacaenelmundo.com, está comprometido con la puesta en valor de patrimonio cultural inmaterial de la región de Tarapacá. Por eso, lleva años trabajando en terreno en el levantamiento de información y registros audiovisuales de una de las fiestas más importantes del norte grande.
En el año 2016 registramos la festividad a través de la experiencia del Baile Religioso Morenos de la Oficina Salitrera Victoria, lo que se convirtió en el documental “La Victoria de los Morenos” (míralo aquí). Y al año siguiente, en 2017, trabajamos en el cortometraje documental “La Rompía del Día” (míralo aquí), donde acompañamos al Checo en su recorrido por el pueblo la madrugada del 10 de agosto.
A partir de lo que has estudiado, ¿cómo se ha ido configurando la fiesta a lo largo de los años y cómo ha ido cambiando? ¿Qué tradiciones se mantienen desde sus inicios?
La fiesta en su origen fue una fiesta patronal y con el tiempo se ha ido transformando en un culto mestizo y popular, que crece en popularidad cada año; ya participan alrededor de 38 bailes religiosos y cada año la fiesta dura más, se le agregan horas. Se puede decir que es una festividad que mantiene firmemente sus tradiciones.
¿Cuáles son los principales hitos comunitarios de la fiesta de San Lorenzo?
Como en muchas fiestas religiosas, los principales hitos son el inicio de la fiesta, la entrada de los bailes, el saludo de los músicos, la víspera, el alba, la rompía del día, la misa del medio día del 10 de agosto, el cachimbo en la plaza, la procesión, y la despedida de los bailes.
¿Quién es para los devotos San Lorenzo? ¿Cómo es su relación con la imagen?
San Lorenzo, llamado cariñosamente como el “Lolo” por los devotos y devotas, es el amigo, patrón, compadre, el protector. Tiene fama de ser un santo cumplidor y cobrador. Quien no cumple sus mandas, sufre el mal humor de San Lorenzo.
La imagen es venerada por los fieles, y ahí se da una característica especial, ya que hay una gran organización de cargadores de San Lorenzo, los que se disponen para cargar al santo durante toda su procesión.
¿Cómo impacta el coronavirus en la celebración? ¿Crees que va a fijar un “antes” y un “después” en la fiesta?
El coronavirus impacta en la realización normal de la fiesta; ahora bien, es impresionante ver lo que se ha generado, cómo se han activado las redes sociales, y cómo los devotos y devotas han decorado sus casas para recibir al Santo. Han transformado los rituales por acciones virtuales que les permite encontrarse y seguir unidos en la fe.
No creo que exista un antes y un después, ya que todos esperamos poder estar el otro año en el pueblo de Tarapacá celebrando como de costumbre. Pero sin duda, este año quedará en la memoria de todos y todas los que hemos vivido esta fiesta de manera distinta.
Imágenes: Tarapacá en el mundo (www.tarapacaenelmundo.com)
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